ERRORES EN EL USO DE LAS MASCARILLAS QUE DEBEMOS EVITAR
Errores al usar la mascarilla. Es evidente que uno de los accesorios imprescindibles en nuestro vestuario desde que el COVID entró en nuestras vidas es la mascarilla, de uso obligatorio, e incluso declarado producto de primera necesidad.
Pero inicialmente, lo que tenemos que tener claro a la hora de pensar en mascarillas, que eviten el contagio en la pandemia, es aprender a identificar las mascarillas y usarlas en el lugar adecuado y de la forma correcta.
Tipos de mascarillas y cuál debes usar según las pautas facilitadas por Sanidad
En las últimas recomendaciones que ha facilitado Sanidad, se recomienda el empleo de mascarillas higiénicas o quirúrgicas, teniendo cada una de ellas diferente nivel de protección. Ambas las puedes adquirir en farmacias, en tiendas especializadas, pero ojo, que han pasado a distribuirse casi en cualquier sitio, y muchas de ellas carecen de las homologaciones necesarias.
Las mascarillas higiénicas son aquellas que únicamente sirven de barrera, y que su objetivo es reducir el riesgo de transmisión del virus en usuarios no enfermos. Las hay reutilizables (de tela pero con filtro desechable) y no reutilizable.
Las mascarillas quirúrgicas son las que se usaban en los procedimientos de cirugía, y en este momento están indicadas para evitar la transmisión del virus en personas diagnosticadas con coronavirus; con el objetivo de minimizar el riesgo de contaminación. Son desechables y pueden llevar hasta tres capas de protección.
Ninguna de las anteriores mascarillas tiene un nivel apropiado de protección frente a la inhalación de partículas, así como tampoco ninguna de ellas se consideran como equipo de protección individual para contribuir a la mejora de las condiciones de seguridad y salud (EPI). Además hay que tener en cuenta que los ojos son el órgano por donde más partículas entran después de boca y nariz.
Las mascarillas de alta eficacia o autofiltrantes, cuentan con un filtro de micropartículas, convirtiéndolas en un mecanismo más fiable frente a la inhalación de diversos agentes contaminantes excepto gases y vapores.
Están consideradas por la Unión Europa como equipos de protección individual y su nivel de protección es aceptable. Según su rendimiento nos podemos encontrar con:
Mascarillas FFP1 (eficacia de filtración mínima del 78%). No son recomendables para uso médico ya que no tienen una correcta protección frente a aerosoles.
Mascarillas FFP2 (filtración mínima del 92%). Están recomendadas para el personal sanitario que atienda posibles casos de infección o personas que se encuentren aisladas que lleven medias de protección individual.
Mascarillas FFP3 (filtración mínima del 98%). Su uso está recomendado para personal sanitario que atienda casos en los que los aerosoles favorecen el contagio, y especialmente en hospitales donde se realicen maniobras de proximidad a pacientes enfermos.
Recomendaciones de la OMS respecto del uso de mascarillas: errores a evitar
Las indicaciones básicas sobre la manera de ponerse la mascarilla según la OMS son lavarse las manos antes de ponerse la mascarilla, y también antes y después de quitársela, así como cada vez que la toque y comprobar siempre que le cubre completamente la nariz, la boca y el mentón.
Cuando se quite la mascarilla, hay que guardarla en una bolsa de plástico limpia; si es de tela lávela cada día y si es una mascarilla médica, tírela a un cubo de basura, y no utilice mascarillas con válvulas.
Según los expertos, se desaconseja guardar la mascarilla por el COVID-19 en una bolsa de plástico pues, la humedad que se genera dentro de este material, favorece la proliferación de otros patógenos. Concientizar los errores al usar la mascarilla es vital.
Por otra parte, el modo en el que podamos desechar la mascarilla también es muy importante y no debe tirarse en cualquier lugar. Es mejor esperar a llegar a casa, introducirla en algo plástico fuertemente cerrado y tirarlo a la basura siempre mejor con pedal, para no utilizar las manos en ningún caso.
También hay que tener mucho cuidado con ponerse la mascarilla de manera inadecuada pues puede ser un factor importante que dé lugar a un posible contagio. Como hemos dicho antes, la mascarilla debe cubrir la nariz y la boca en su totalidad y no se debe subir a la cabeza o ponerla en nuestra barbilla ni en ninguna otra parte del cuerpo. Errores al usar la mascarilla que pueden costarnos el contagio.
La Sociedad Española de Microbiología insiste en que, para que el uso del tapabocas sea eficaz y evitar la infección, una vez que salgamos a la calle, debemos usarlo en todo momento sin tocarlo.
Es incorrecto poner la mascarilla en la muñeca, colgarla de las gafas o utilizarla como un brazalete. Y, por supuesto, lo que jamás deberemos hacer es dejarla en la mesa, el mostrador de un restaurante o un comercio. Debemos evitar cometer estos errores al usar la mascarilla
Además, si no nos la quitamos, evitaremos también abandonarla en algún lugar o meterla en los bolsillos. Tampoco debería guardarse en el bolso o sacudirla, ni entrar en contacto con nada diferente a nuestra propia cara. Cuanto menos se mueva de su lugar correcto, menos riesgo correremos.
Esperamos haber despejado dudas con respecto a los errores al usar la mascarilla que cometemos sin percatarnos de ellos.
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